Nobuna-chan vs Mavis

Los rayos del sol llegaban con fuerza desde el cielo hasta la superficie de la tierra, iluminando todo a su paso  y vanagloriando-lo con su inmensa luz de día en el país del agua, entre uno de los bosques principales de la región la joven sacerdotisa caminaba con calma hacia el norte hacia al encuentro con una shinobi médico a petición de Takatsuka-dono para que se mostrara ella misma de nuevo ante un igual.

La joven de cabellos azulados no dudo en ir pues eran ordenes directas de aquel hombre pero aún así, de sus labios escapó un suspiro al contar que esta era la tercera vez que la mandaba a este tipo de encuentros con otros guerreros, en parte se lo agradecía pues aquellos orbes ámbar que poseía podían ver más allá de lo que alguna vez había visto bajo la protección del clan Yuki. 

Cuando llegó al lugar acordado la sacerdotisa simplemente aguardó hasta que su invitada apareciera en aquel lugar, el lago era de gran tamaño y considerando que era una usuaria de elemento agua se sentía favorecida pero a la vez en desventaja de no conocer la naturaleza elemental de la mujer que esperaba para una breve lucha entre ambas, igualmente todo lucía tan tranquilo que por un momento Mavis no evitó recordar su vida como la sacerdotisa de su clan, dispuesta a ayudar y servir como soporte de las personas quienes buscaban consuelo en una figura religiosa como lo era ella.   

No fue hasta que sintió la cercanía de una persona que decidió arrojar esos pensamientos fuera para enfocar la mirada en la dirección de su visitante -Mavis Yuki, un placer conocerla.... Aunque sospecho que Takatsuka-dono ya le ha informado de este encuentro- 

 

-Es un placer conocerla Nobuna-chan, espero que este encuentro sirva como fuente de información para ambas, y no me sorprendería que es Takatsuka-dono haya planeado esto desde un inicio.... Nada se le escapa a ese hombre- Sus palabras eran sinceras y a la vez demostraban que a pesar del poco conocimiento del pelinegro próximo líder de Kiri, Mavis sería capaz de seguirlo por aquella curiosidad innata que tanto demarcaba su personalidad así como sus ansias de libertad.

Dio un pequeño salto de donde estaba sentada para estrechar la mano de la mujer de cabellos azules de tonos fuertes, a la vez que sonreía de lado y hacia su clásica reverencia hacia ella. Tras aquel pequeño acto de reconocimiento de ambas kunoichis, la sacerdotisa asintió levemente indicando que era el momento de iniciar aquel entrenamiento. -Comenzare primero Nobuna-chan, espero no le moleste mi atrevimiento... Suiton: Eria tojikome- vociferó a tiempo que su chakra elemental se alzaba y se materializaba entre sus manos formando una esfera de agua recolectada del mismo líquido vital por las cercanías al lago y de toda fuente de naturaleza. 

Apreció con la mirada cada detalle de su compañera, necesitaba entender con rapidez sus movimientos y destrezas, quizás así podría batallar a su altura. Mavis no era de aquellas personas denominadas "genios" en algo, simplemente era una joven chica con sueños de utopía que planeaba llegar a realizar, aún si el precio a pagar era demasiado alto.  

-No es tan notorio el no darse cuenta de que siempre tiene segundas intenciones tras un movimiento, igual no es de mucha importancia siempre que Kiri sea beneficiado- 

Hablo con normalidad a tiempo que aún divisaba a la mujer de cabellos azules y mirada del mismo color. Rápidamente la mujer del clan Odatsuka, libero una defensa capaz de bloquear la esfera de agua de Mavis, sonsacando una pequeña mueca de alegría de su parte, le gustaba divertirse en algunos encuentros done aprendía mas que el simple hecho de herirse por gusto, y este era uno de esos. Mavis agradecía aquel encuentro predestinado y por ello pensaba primero reservar los movimientos de Nobuna, para emplear un plan de ataque, por el momento estaba dispuesta a observar y detallar su avance como kunoichi y manejo del chakra. 

Esquivando los sablazos de Nobuna, la sacerdotisa emitió un comentario -La mayoría gustad e armas cortantes.. Me intriga eso-  

-¡Oh! ya veo interesante información de su parte... Es muy cierto que los médicos siempre busquen estar a salvo, ya que de ellos depende mucho la vida del resto de ninjas, pero aún así ya es común ver mas espadas- Dijo mas para ella misma en señal de que comprendía todo que arpa la mujer del clan Odatsuka quien aguardaba unos minutos antes de iniciar el encuentro de nuevo,  notando como varios hilos de chakra se hacían presentes rodeando a la sacerdotisa en un rápido movimiento para luego posicionarse con su espada delante suyo y alzar el filoso sable contra ella.

No reaccionó a tiempo y por consecuencia Mavis notó como el frío sable es incrustaba en la piel desprotegida de su hombro, provocando que brotara mucha sangre que manchó sus blancos ropajes en un santiamén, coloreandolos de un rojo vivo mientras la joven apretaba los dientes al sentir el dolor que calaba hasta sus huesos.  

-Ya entiendo mejor porque, pero me siento extraña... No es solo un simple sable ¿no?- Dijo notando como su cabeza comenzaba a dolerle de repente, llamando su atención, había recibido varias veces muchos cortes pero ahora este corte le hacia sentir mareada e indispuesta. Acaso la espada estaba bañada en algún líquido, o de seguro algo extraño que un ninja médico solo sabía.  

Sintió como su cuerpo se tambaleaba repentinamente, el veneno parecía estar entrando en acción en ella, y aunque tratara de enfocar bien la mirada la muchacha no podía siquiera bien donde se hallaba la mujer del clan Odatsuka, por ello mismo no podía atacar como le era debido y seguir con sus ataques. en ves de eso simplemente se calmó y trato de respirar mejor pues el aire le faltaba, escuchando cada palabra que la peli azul le decía.

-Es bueno saberlo, como sacerdotisa no puedo siquiera pensar en enfermarme o faltar a mis responsabilidades para con Kiri. Contando con una ninja medico de su categoría ha de ser fácil para usted contrarrestar esto Nobuna-chan- Dijo cerrando sus orbes y descansando un momento, de todas formas la vista ya comenzaba a fallarle como para hacer demasiado esfuerzo en algo que no le serviría por ahora,  se relajaría y luego buscaría una solución e eso.

-No es una molestia, sabe como es él tan extravagante como siempre. Un día simplemente se apareció en el santuario de Kiri, parecía no estar bien emocionalmente pero quizás era solo su forma de hacer una presentación... Fue una charla amena, al menos lo considero yo así- Rió unos segundos a pesar de su estado, era sabido que ella no era alguien que cambiara de humor al menos cuando se trataba solo de ella y de nadie más. 

- Vaya, así que llego a usted Yuki-san jejeje. - Dijo con una sonrisa pues aun no conjuntaba la idea del pelinegro y de su estado emocional, no obstante, sigo mirando a la joven sacerdotisa un poco preocupada por su estado.

-No es necario que me diga Yuki-san, con Mavis esta bien Nobuna-chan- Anunció la peli celeste mientras aun mantenía los ojos cerrados para recuperar chakra y poder estabilizar su cuerpo mientras tanto seguía escuchando las palabras e la ninja medico con cuidado y con cierta emoción al saber que no era la única que se preocupaba por Kiri, que más gente estaba dispuesta a salir adelante por todo ese pueblo y nación, saber eso le sacó una risa de lado que no ocultó.

-Eso trato hacer, pero alguien tan curiosa como yo, no es del todo lo más relajada que puedes encontrar en mí, de todas formas me interesa saber como conoció a Takatsuka-dono- Hablo inclinando la cabeza hacia un costado simbolizando su pregunta para la joven kunoichi. Tras aquel acto llevó una de sus manos a la herida notando que el sangrado aún persistía pero que no estaba empeorando, después de eso ya trataría con eso y se alegraba que no estuvieran cerca de Kiri, o le preocuparía que los ciudadanos la vieran en ese estado.  

- De acuerdo, sera Mavis-san jejeje.- Dijo en tono amable la peliazulada al escuchar la petición de la peliceleste. Posteriormente observo un poco la herida de la sacerdotisa y pensó que ya había pasado suficiente tiempo como para que el veneno corriera por todo el cuerpo. Enseguida escucho la pregunta de Mavis y no le sorprendió que lo preguntara por lo que sonrió recordando como fue que lo conoció y después de un momento hablo.

Sabia que no podía especificar mas pero, aun así sonrió con un deje de alegría pues era la verdad, la encontró justo en el momento perfecto. Nobuna le sonrió y mirándola fijamente le dijo. -Mavis-chan, me alegra saber que no solo yo busca ayudar a estas personas, en verdad que es bueno saber que su labor es importante como la mía.-

-Gracias por ello Nobuna-chan..- Respondió con sus orbes ámbar cerradas mientras escuchaba el relato de la kunoichi sobre su encuentro con Takatsuka-dono, le parecía gracioso pues aquel hombre no era de hacer esas cosas pero sin duda había notado la valía en la ninja del clan Odatsuka, pues se trataba de una gran ninja médico. Esto sonsacó una risa de Mavis a tiempo que sentía como el chakra que estaba almacenando por fin podía ser usado, lo primero que hizo fue ayudar a su cuerpo a recuperarse y soportar el veneno inyectado por el sable.  Gracias a su rosario pudo hacerlo pero eso no significaba que era ninja medico, sino alguien que podía canalizar su ckahra a cerrar heridas mas no tratarlas, aludiendo claramente a que el veneno aún seguía en su cuerpo solo que estaba mas controlado.

-Si me alegra oír eso Nobuna-chan, este pueblo merece resurgir y ser tan hermoso como antes, y que podemos confiar entre nosotros para que este sueño no sea solo eso, sino una realidad- Dijo sintiendo como su ckakra seguía emanándose con claridad, quizás ya era hora de continuar el ataque con la gran ninja médico -Creo que es hora de retomar esto, Nobuna-chan... Suiton: Eria tojikome- Dijo creando una esfera de agua, capaz de ir contra la mujer de cabellos azules, todo dependía de ella.