Hayato vs Hiroki

–Ni me lo digas, igual estoy descontento pero tenemos pocas alternativa, era eso o traerle deshonra al clan– exclamó Hayato mientras avanzaba al tope de su velocidad, abriéndose paso por las veredas y senderos de los bosques del País del Fuego. A su lado iba  Tsume, el lobo gris que siempre lo acompañaba. Era una misión muy particular, una misión de búsqueda y recuperación, en la cual se necesitaba contar con una extraordinaria habilidad de rastreo.

No tardó mucho en poder detectar el aroma de su objetivo, era un joven miembro del clan Senju. Ya era de noche, las sombras bien les podrían ayudar en su objetivos, el problema era la cercanía a la villa del clan Senju, si no era rápido al momento de actuar, las cosas podrían complicarse. Al llegar a un lago, pudo ver al joven, quien parecía estar entrenando para perfeccionar sus habilidades.

Sin mostrar nerviosismo comenzó a avanzar, escuchando la pregunta del Senju, quien se dio cuenta de su presencia. –  Solo soy un shinobi más…–  exclamó mientras tomaba su  kusarigama. Aun recordaba la orden del Natsuki Kai, el Señor Feudal del Pais del fuego, quien le ordenó llevarle al joven Senju hasta su presencia. Sin causarle heridas innecesarias y que por nada del mundo alguien se diera cuenta de todo ello. El chico era necesario para sus planes.–  Hiroki Senju, las autoridades del País del Fuego lo consideran una amenaza potencial, así que se me ha enviado a arrestarlo, es mejor que se entregue sin oponer resistencia y se evite iniciar una pelea en la cual saldrá derrotado–

Hayato suspiro al ver la reacción del joven Senju. Pero estaba claro que eso sucedería, era imposible que aceptara entregarse sin oponer resistencia.  Guardó silencio un instante, sin dar respuesta alguna. –En ese caso, no me queda muchas opciones. Si así quieres que se den las cosas, que así sea– sentenció sin quietarle la mirada de encima.

–Tengo que hacer esto rápido, no quiero perder tiempo y darle la oportunidad de hacer que el combate se alargue– si eso llegara a pasar, algún miembro del clan Senju, podría auxiliar a Hiroki, haciendo  que la misión se transformara en un fracasó. Fue unos instantes de calma pesada. Preludio al combate que se daría.

Dio un paso hacia enfrente y recargando su peso en su pierna derecha, dio un salto largo, para después iniciar una carrera en dirección del Senju. Si lograba hacer un buen uso de su velocidad, podría terminar todo en unos instantes.  Cerró su puño derecho y lo dirigió al rostro de Hiroki. El golpe no tenía la fuerza como para lograrlo derribar, más que nada, la intención de Hayato era conocer  la velocidad de reacción de su oponente. Al mismo tiempo, Tsume se lanzó de forma coordinada con su compañero. Y dio un salto directo a uno de los costados del joven, con su boca abierta, para darle una mordida.

El puño del Inuzuka choco con una pared de agua, su instinto se activó en ese momento y dio un salto hacia atrás, ejecutando así una maniobra evasiva, si no retrocedía seria atrapado por el golpe de agua. Después de dar unos pasos hacia atrás, logro salir del rango de acción de aquel jutsu. –Atacar de frente no es tan buena idea…– suspiro un poco mientras veia los movimientos del joven Senju.

–Me la pones fácil usando espadas, sería mejor que cambiaras de arma– exclamó tomando la cadena de su kusarigama, en cuestión de logística su arma tenía la ventaja, una sola brecha que dejara el espadachín y la cadena podía apresar la hoja de la espada inmovilizándola. Lamentablemente para Hayato, esta ocasión solo pudo bloquear la trayectoria del arma con su kusarigama.

–¿Que hacer? … – se preguntó un momento, pero no quiso darle más tiempo a Hiroki para que lo lograra analizar. De nuevo avanzo, pero esta vez dio un salto, quería evitar el suelo. Lugar desde donde se originaba el agua del Jutsu del Senju, si podía darle una patada desde las alturas, lograría desequilibrar su ritmo de combate. Mientras tanto, Tsume lo rodeaba para poder atacarlo en algún punto ciego que lograra descubrir.

–Sujeto complicado de enfrentar, tengo que reconocer que no me esperaba encontra con un Senju tan rápido– musitó mientras se acercó a darle un golpe a Hiroki. Quien de nuevo mostro su prodigiosa agilidad poniéndose fuera de alcance. Moviéndose entre los árboles, el joven Senju pudo maniobrar para evitar los ataques del Inuzuka, quien se mostró frustrado de ver como el terreno le jugaba en contra.–Un conejo es más fácil que atrapar, incluso las ardillas no se mueven tan rápido– exclamó al ver como se comportaba su oponente.

Aunque se perdió en los espesos de los arbustos, el olfato de Tsume era suficiente para localizarlo, después de dar un salto siguiendo su rastro, lo encontraron. Enfrente del Hayato y su compañero, se encontraba Hiroki dispuesto a utilizar su jutsu.  De inmediato se replegaron, para evitar ser  atrapados por el torrente de agua.

–Un poco de agua no te mantendrá a salvo– dijo Hayato mientras saltaba  a una rama y después lanzarse en picada contra el Senju. Si lograba golpearlo y cortarlo con su kusarigama, Tsume podría acercarse para poder morderlo.

–Eres rápido, pero el olfato de un lobo abarca varios kilómetros, ni si quiera tu puedes salir  de esa área– exclamó,  mientras veía como el Senju se encontraba ante sus pies herido de gravedad.–¿Acaso creíste que huir como un conejo te serviría? Ese es el pago que tienes que pagar ahora por tu falta de valor– rodeo el cuerpo del joven preguntándose cuanto resistiría después de recibir ese último golpe. Una respuesta que no tenía. Aunque los de ese clan eran resistentes y sus jutsus poderos, aquel combatiente parecía ser un novato. –No tardara mucho en terminar todo– se alejó un poco, tomando un poco de distancia, para así preparar un nuevo ataque con el cual terminar ese combate.

Tsume siguió sus pasos, poniéndose justo alado de su compañero, a unos metros de distancia de donde el otro shinobi se encontraba casi desmayado. Sin alargar mas lo que era inevitable, tanto el Inuzuka como el canido comenzaron a correr hacia su objetivo, tomando el impuso necesario dieron un gran brinco y cuando caían en picada comenzaron a girar.–Gatzuga– grito al unísono de un aullido del lobo al  crear el nuevo jutsu.

–Huir nunca es la mejor opción….. Eso te lo aseguro– las palabras de Hayato eran muestra que el pensaba que era mejor encarar los problemas al intentar huir. Por lo menos asi se vendia cara una derrota. –Como dicen las historias, un Senju no puede ser derrotado tan fácilmente– no podía negar a esas palabras que había escuchado eran ciertas. Hiroki comenzó a levantarse lentamente, claramente afectado por el golpe  recibido. Tenía que felicitar su espirito de lucha y la manera temeraria que lo enfrentaba aun con esas heridas. –Da tu mejor golpe– mustió, el joven tomó su espada  y se lanzó a  toda velocidad a intentar darle una estocada. De un golpe certero logró hacerle un corte profundo, el cual comenzó a sangrar casi instantáneamente. El Inuzuka ni siquiera reaccionó, no tuvo tiempo para hacer el más mínimo movimiento. La velocidad y destreza de su oponente a la hora de empuñar una espada era de temer.–Tsss … no espere recibir un corte como este–

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HP: 7200 – 2750 = 4450