Udono-sama Vs Karura

-Lalalalalala.- Sentado lateralmente en el asiento de cuero que tanto solía preferir en las construcción estrenada no hace mucho en la tan llamada Kirigakure, el shinobi de piel azulada se mantenía con los pies colgando y una extrema reticencia a levantarse o a hacer alguna otra cosa productiva. Si ahora sus emociones, sensaciones y peculiaridades se habían ido al tope y se quedaban ahí colgadas hasta que algo lo suficientemente fuerte las sobreseía, la pereza se mostraba como la dominante en esos mismos momentos y por lo mismo, no pretendía avanzar ni un solo centímetro.

-¿Uh?- Inquirió en voz baja y gruñona girando la cabeza unos cuantos grados en dirección de la entrada, observando la figura de una chica de cabello negro, atuendo rojo y complexión pálida, que sin duda eran características de... -¿Qué hace una Uchiha aquí? ¿Acaso el bicho ese que los dirige sigue estando resentido porque le pateé el trasero? Oh, por favor, que lo supere de una maldita vez.- Espetó de manera aburrida, devolviéndose a juguetear con sus pulgares, tarareando para si mismo.

-Te equivocaste de hora, día, semana, mes y año, la persona que estás buscando salió hace tiempo de aquí.- Comentó el aludido mientras removía los pies al compás de la canción que se encontraba tarareando más para sus adentros que para el exterior, plenamente centrado en su risilla y ritmo personal que en la mujer que ahora se levantaba frente a él. -Yo solo soy su hijo menor bastardo o algo así.- Completó para escuchar lo que la fémina tenía que decir respecto al tan llamado Madara Uchiha. -Si no quieres creerlo no lo hagas, no es que sea precisamente un asunto de mi incumbencia. Aunque no me extraña que el tipo no lo haya admitido, fue vergonzoso hasta para mi usarlo como una muñeca de trapo llorona - "Oh Hotaru, oh Hotaru, oh Hotaru, esto no es real ¡yo no te maté!" bla bla bla bla bla bla. Marica.- Dijo con tono aburrido y perjuicioso, picándose la nariz para así sentarse de manera un poco más "tradicional". -¿Todavía sigues aquí? ¿No tienes algo que hacer o qué se yo? ¡Shu shu! ¡Vete a jugar a otro lado!-

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HP: 10200

-Que gentecilla tan insistente, carajo.- Dijo el shinobi del País del Agua para así reacomodarse en su asiento y ver como a su posición se acercaba una bola de fuego - algo típico en los Uchiha - y sin mucho esfuerzo aplicar la típica técnica de reemplazo, usando agua de los alrededores. Justo al instante de chocar, el fuego convirtió el líquido en vapor, dejando que Takatsuka apareciera por detrás de la mujer del clan de los gunbai. -¿Por qué siempre tienen que hacer que me mueva o me deje de picar la nariz? Ugh.- Esbozando el sello de la Serpiente inhaló con fuerza, escupiendo un mar de niebla que instantaneamente rodeó todo el campo de batalla con su opacidad, blancura y olor a sal, permeando todo lo que había e impidiéndole a la muchacha ver más allá que una pantalla blanca de movimientos erráticos.

-Si quieres "jugar" al menos encuentrame primero, bicho feo.- Le espetó con aburrimiento y fastidio impregnados en su voz, dejando que su voz se desvaneciera en la niebla que ahora se revolvía de un lado al otro.

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Jutsu D: "Muon Satsujin Jutsu" activado.
Efectos Activos: +2 Jutsu. +10 Dificultad de evasión.

HP: 10200

-...- Deteniéndose de pronto en medio de sus pasos, el shinobi del País del Agua levantó una de sus cejas para así darse una palmada en la barriga, afilando su mirada mientras se relamía poco a poco los bigotes. -¿Acaba de decirme gordo? ¿En serio?- Murmuró para sus adentros sin saber interpretar aquel hecho, pareciendole de lo más raro y no por su propio tamaño, sino porque tal como decía la chica, la vista no era todo. Con un poco de práctica y conocimiento, esa barrera de niebla no resultaba ser la gran cosa. -Que bien, me dijeron gordo.- Completó al ver una luz en medio de la blancura del vapor así como oyendo los movimientos de la mujer con la que combatía. Haciendo uso de su usual capacidad para sentir la presencia del oponente levantó una de sus manos para dar un manotón y desviar la bola de fuego, chamuscándose la palma mientras esquivaba en última instancia el embate lanzado por algún tipo de arma punzo-cortante. -Oh sí, que bien, me dijeron que soy un maldito gordo salame.-

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Efectos Activos: +2 Jutsu. +10 Dificultad de evasión.

HP: 10200 - 2225 = 7975

-Preferiría comerte a ti. Siempre he tenido curiosidad por saber que tan salada es la carne de un humano si se escabecha.- Declaró el shinobi del País del Agua con una nueva expresión en el rostro. No estaba mintiendo; con toda esa charla relacionada a la comida sus nervios se habían movido en su cerebro para recordarle una que otra cosa de las viejas cuestiones que antes se preguntara, entre ellas "¿cuál es el sabor de la carne humana?". Tenía hambre, su curiosidad estaba por las nubes y por sobre todo, el olor del fuego le hacía pensar en enormes ollas y fogatas. -Se me hizo agua la boca.- Murmuró relamiéndose de nueva cuenta los labios, dando otro manotón para desviar la bola de fuego con la mano herida, quemandola más de la cuenta - ampollas, carne enrrojecida por sobre el azul de su piel teñida por el Kekkei Genkai y el humo que salía por el reciente contacto con un disparo ardiente, todos factores que no disminuían para nada su nuevo deseo: quería comer y por ello mismo, su instinto asesino se proyectó en el aire. -Déjame darte una mordidita.- Dijo apareciendo tras la pelinegra, lanzando una dentellada directo a su cuello.

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Efectos Activos: +2 Jutsu. +10 Dificultad de Evasión.

HP: 7975 - 3093 = 4882

-Cobarde.- Le dijo el shinobi del País del Agua con evidente tono decepcionado impregnando su voz, relamiéndose los bigotes para limpiarse con la manga de su atuendo. Por más que le pareciera ridículo que la chica huyera de manera tan veloz, debía admitir algo - había sido sumamente desagradable y fuera de tono con su propia personalidad, todo debido al impulso aumentado por su Límite de Línea de Sangre. Resoplando por lo bajo mientras daba unos cuantos pasos hacia atrás en pos de reagruparse, el pelinegro se lamió los labios con detenimiento, intentando controlar la curiosidad, aquellas ganas que tenía de quebrarle el cuello a la mujer para cocinar su carne a fuego lento. -Como sea... adelante. Has alguna otra cosa antes de que te arranque un brazo y lo ponga en la freidora.- Dijo finalmente, acuclillándose para intentar calmar el impulso y más que eso, preparar una contraestrategia. En ese momento empezó a sentir el hormigueo de la sangre entrando por las vías de su mano quemada, perturbándole aún más la mente. -Vamos vamos vamos.- Murmuró, continuando con su tic.

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Efectos Activos: +2 Jutsu. +10 Dificultad de Evasión.

HP: 4882

-Que la gente estúpida del País del Fuego tenga otras espectativas, o mejor dicho, que estén acostumbrados a oler a mierda y se queden perplejos al experimentar otras cosas no es mi problema. Aprende tu lugar, zorra barata.- Dijo el shinobi del País del Agua para utilizar de nueva cuenta su jutsu de reemplazo, apareciendo al otro lado del salón, específicamente encima del enorme asiento que hubiera ocupado momento antes de que la pelinegra interrumpiera su sesión de ocio nasal. -Como sea, si no quieres mover el trasero para terminar con esta estupidez da igual.- Declaró con aburrimiento total mientras formaba el típico sello de clonación y creaba un doble que apareció al lado opuesto del campo de batalla, cercando ambos lados por donde atacar y obviamente, defender. Tras un segundo de interludio, la copia usó tres sellos de manos y un solo escupitajo para enviar sendos proyectiles en la forma de agujas sobrecrecidas contra la mujer - una contra su cuello, otra contra el tabique y otras tres contra ambas piernas y un brazo. -Y me bañé hace dos horas, cosa que por lo visto no aplica a ti, fea.-

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Jutsu: 9 + 2 (Muon Satsujin Jutsu) = 11
Chakra: 42 + 5 (Zaude) = 47
Daño Jutsu C: 2750 + 1375 = 4125 (Se evita con Defensa +60)
Efectos Activos: +2 Jutsu. +10 Dificultad de evasión.

HP: 4882
HP - Bunshin: 3600